Un Estudio Encuentra que el Ejercicio Constante Puede Tener Beneficios Positivos para la Salud Física y Mental en Pacientes con Hipertensión Pulmonar

Un estudio reciente ha encontrado que los programas de ejercicios aeróbicos y de entrenamiento de fuerza pueden tener un efecto a largo plazo sobre el funcionamiento físico de los pacientes con hipertensión pulmonar (HP).

La HP es una afección crónica en la que los pacientes enfrentan fatiga, disnea de esfuerzo y otros síntomas. Se ha descubierto que la inactividad agrava los síntomas. Esto, a su vez, puede tener efectos psicológicos como un aumento de la ansiedad.

El Estudio

El objetivo principal de este estudio fue examinar los efectos del ejercicio a largo plazo para los pacientes con HP. El estudio evaluó el ejercicio durante 6 meses en un total de 22 pacientes.

Los participantes se dividieron en dos grupos al azar. El primer grupo se sometió a un régimen de ejercicio de 6 meses que incluía tanto ejercicios aeróbicos como entrenamiento de fuerza. El segundo grupo no recibió ningún entrenamiento físico.

Antes del tratamiento, todos los participantes tuvieron una evaluación física y una evaluación psicológica. Estas mismas evaluaciones se realizaron después de transcurridos los 6 meses. Luego, todos los participantes fueron evaluados nuevamente 3 meses después de que terminó el período de ejercicio (la marca de 9 meses desde el inicio del estudio).

Los investigadores evaluaron tanto los resultados físicos/funcionales como los resultados psicológicos/de calidad de vida de los participantes. Descubrieron que después de 6 meses, aquellos que habían pasado por el régimen de ejercicio tenían mejoras físicas significativas. Estos incluyeron un mejor tiempo de ejercicio cardiopulmonar y fuerza de las extremidades inferiores. También se observaron mejoras psicológicas.

Todos estos resultados se mantuvieron cuando los pacientes fueron evaluados nuevamente a los 9 meses.

También es notable que no hubo complicaciones documentadas de aquellos en el grupo de ejercicio durante la duración del estudio.

En conclusión, los investigadores han concluido que un régimen de ejercicio a largo plazo es seguro y eficaz para los pacientes con HP. Tiene beneficios que abarcan tanto el ámbito físico como el psicológico. Por tanto, el ejercicio puede mejorar tanto la calidad de vida de los pacientes como su bienestar físico.

Puedes leer más sobre este estudio aquí.