De acuerdo con una historia de Real World Health Care, la enfermedad del hígado graso no alcohólico y su forma menos común y más seria llamada esteatohepatitis no alcohólica (NASH, por sus siglas en inglés) son condiciones silenciosas pero mortales que a menudo causan pocos o ningún síntoma al principio, pero pueden convertirse fácilmente en condiciones más graves. como la cirrosis o incluso el cáncer de hígado. La Fatty Liver Foundation se compromete a tomar medidas preventivas abogando por una detección temprana para que las intervenciones y los cambios en el estilo de vida puedan comenzar antes de que sea demasiado tarde.
Sobre la Esteatohepatitis no Alcohólica
La esteatohepatitis no alcohólica (NASH, por sus siglas en inglés) es un tipo de enfermedad hepática en la cual la grasa se deposita en el hígado independientemente del consumo excesivo de alcohol. Esta enfermedad puede progresar rápidamente. Los factores de riesgo incluyen síndrome metabólico y resistencia a la insulina. También parece haber algún componente genético de la enfermedad también. Esta condición también aumenta el riesgo de otros problemas de salud y cáncer de hígado. Los hombres también parecen estar en mayor riesgo, ya que la enfermedad es casi el doble de la tasa que las mujeres. Los síntomas de la esteatohepatitis no alcohólica incluyen ictericia, malestar, fatiga y dolor o malestar abdominal. Sin tratamiento, el hígado puede cicatrizarse y el paciente puede necesitar un trasplante de hígado. Sin embargo, la condición también se puede controlar con una dieta adecuada, el uso de ciertos medicamentos y el ejercicio. Para obtener más información sobre la esteatohepatitis no alcohólica, haga clic aquí.
La Importancia de la Detección Temprana
Existen métodos para la detección eficiente y efectiva de la esteatohepatitis no alcohólica, pero obtener una evaluación no es tan fácil como debería ser. La detección es poco frecuente sin que se presenten síntomas, aunque muchas personas con la enfermedad pueden no tenerlos. Esto dificulta la comprensión de la prevalencia de la enfermedad como un todo, y las aseguradoras a menudo no cubren las pruebas de detección a menos que esté claro que el paciente está enfermo.
La fundación planea mejorar el acceso a la detección temprana con el objetivo de escanear hasta un millón de pacientes al año en 400 sitios de prueba diferentes que comienzan con pacientes con diabetes tipo 2. Se estima que casi el 70 por ciento de estos pacientes padecen de hígado graso comórbido o esteatohepatitis no alcohólica. El objetivo final del proyecto es brindar a los pacientes una oportunidad decente de hacer cambios críticos en sus vidas para prevenir la progresión de la enfermedad.
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