Investigadores de la Universidad de Barcelona han encontrado recientemente un nuevo biomarcador que podría diagnosticar antes la enfermedad de Parkinson. Este biomarcador es un fragmento de proteína llamado GPR37. Se encuentra en el líquido cefalorraquídeo. Específicamente, los investigadores pudieron diferenciar que los pacientes con enfermedad de Parkinson tenían este biomarcador, mientras que aquellos con Alzheimer no lo tenían. Ser capaz de diferenciar entre estas dos condiciones neurodegenerativas es fundamental para el diagnóstico.
Este estudio fue publicado en Translational Neurodegeneration.
El Estudio
Este estudio es tan influyente porque hasta la fecha, ningún estudio ha encontrado un biomarcador para el diagnóstico de Parkinson que sea clínicamente significativo.
GPR37 es parte de un receptor acoplado a proteína G. Se encuentra en muchas regiones diferentes del cerebro. Los investigadores nunca han entendido completamente la función de estas células.
Este equipo descubrió que en pacientes con enfermedad de Parkinson, GPR37 (en forma insoluble) se encontraba en niveles altos dentro del cerebro.
El estudio tuvo un total de 41 participantes. Los pacientes tenían una edad media de 63 años y una duración media de la enfermedad de 5.8 años. Además, hubo 45 voluntarios en el grupo de control que emparejaron a estos participantes en cuanto a edad y sexo. Todos los individuos del grupo de control tenían algún tipo de afección neurológica benigna, como dolores de cabeza por tensión.
Todos los participantes diagnosticados con la enfermedad de Parkinson tuvieron evaluaciones neurológicas y valoraciones de sus síntomas motores y síntomas no motores. Se tomaron muestras de líquido cefalorraquídeo de todos los participantes. Estas muestras se utilizaron para evaluar GPR37 (ARNm y proteína) y ecto-GPR37.
Los investigadores encontraron que la densidad de GPR37, los péptidos ecto-GPR37 y la expresión de ARNm eran mucho más altos en las personas con enfermedad de Parkinson esporádica que en las del grupo de control. No encontraron estas mismas expresiones en personas con enfermedad de Alzheimer.
Viendo Hacia Adelante
Los investigadores señalan que se necesita un estudio más amplio antes de que este biomarcador pueda usarse en un entorno clínico. Ellos quieren realizar un estudio longitudinal.
Afortunadamente, el equipo ha recibido alrededor de $150,000 para seguir adelante con esta investigación y desarrollar una mejor comprensión de la sensibilidad, especificidad y límites de uso de este biomarcador.
Puede leer más sobre este estudio y sus hallazgos aquí.
