Los corticosteroides se usan para tratar una amplia variedad de afecciones inflamatorias, con el asma y la artritis como ejemplos. Sin embargo, estos medicamentos pueden provocar una variedad de efectos secundarios, como presión arterial alta, malestar estomacal y aumento de peso, entre otros. Debido a esto, algunos médicos pueden intentar limitar o disminuir el uso de corticosteroides. Un estudio reciente ha demostrado que es posible limitar el tratamiento con corticosteroides para la granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (EGPA, por sus siglas en Inglés), ya que se demostró que Nucala aumenta las tasas de remisión y reduce la actividad de la enfermedad cuando se administra con corticosteroides. Estos medicamentos son actualmente el tratamiento de primera línea para EGPA, por lo que Nucala ofrece una forma de reducir su uso.

Sobre el Estudio

Titulado «Eficacia y seguridad de mepolizumab en combinación con corticosteroides en pacientes con granulomatosis eosinofílica con poliangeítis», el estudio se publicó en Arthritis Research and Therapy. Un equipo de investigadores de la Universidad de Salud Ocupacional y Ambiental de Japón quería evaluar la efectividad de Nucala en un entorno clínico del mundo real, ya que ya ha demostrado resultados positivos en un ensayo de Fase 3 controlado con placebo.

Para hacerlo, inscribieron a 16 pacientes con EGPA refractaria o en recaída y administraron 300 mg de Nucala cada mes durante un año. Evaluaron la efectividad y seguridad del tratamiento evaluando el recuento de células eosinófilas de los pacientes, la actividad de la enfermedad, la tasa de retención del tratamiento, la tasa de remisión, los eventos adversos y los cambios en las dosis de corticosteroides (o inmunosupresores si corresponde).

Los investigadores también tuvieron acceso a la información médica de los participantes durante el año anterior al estudio, lo que facilitó mucho la comparación. Antes del tratamiento con Nucala, once pacientes tenían EGPA refractaria, cuatro tenían recaídas y un solo paciente estaba en remisión. Posteriormente, estos números cambiaron a seis y diez respectivamente, sin pacientes en remisión. Además, los investigadores pudieron ver las tasas de remisión de los pacientes antes del tratamiento, que fueron del 12.5% después de tres meses de corticosteroides, del 6.3% después de seis meses y del 0% después de un año. En comparación, el tratamiento con Nucala produjo una remisión del 12.5% en un mes, el 31.3% después de tres meses, el 50% después de medio año y el 75% después de un año completo. Los resultados adicionales incluyen:

• La actividad de la enfermedad disminuyó en 0.5 en la puntuación de actividad de vasculitis de Birmingham después del tratamiento con Nucala
• Mejora de los síntomas respiratorios, de oído, garganta y nariz.
• El recuento de células de eosinófilos disminuyó en 146.2 células por microlitro
• Disminuciones significativas en el uso de corticosteroides, de una mediana de 2,665 mg a 1,655 mg al año
• Ningún paciente interrumpió el tratamiento con Nucala

Al final, este estudio demostró resultados positivos, al igual que los ensayos clínicos anteriores. Nucala puede reducir el uso de corticosteroides en pacientes con EGPA al tiempo que proporciona un tratamiento más eficaz y mantiene la seguridad.

Sobre EGPA

Anteriormente conocida como síndrome de Churg-Strauss, la granulomatosis eosinofílica con poliangeítis es una forma de vasculitis asociada a ANCA. Este trastorno autoinmune hace que los vasos sanguíneos se inflamen, lo que limita el flujo sanguíneo hacia y desde los órganos. Los órganos más comúnmente afectados son la piel, el corazón, el tracto gastrointestinal y el sistema nervioso. Hay tres fases en lo que respecta a los síntomas de este trastorno y no afectan a todas las personas afectadas en el mismo orden. Ellos son la fase alérgica, la fase eosinofílica y la fase vasculítica. La fase alérgica se caracteriza por fiebre del heno, problemas de sinusitis, asma y reacciones alérgicas. La fase eosinofílica ocurre cuando hay niveles elevados de eosinófilos, un tipo de glóbulo blanco. Finalmente, la fase vasculítica conlleva la inflamación extrema de los vasos sanguíneos. Los síntomas comunes de esta afección incluyen:

• Sinusitis aguda a crónica
• Asma aguda a crónica
• Neuropatía
• Lesiones o manchas que aparecen en las radiografías de tórax
• Glóbulos blancos fuera de los vasos sanguíneos.

Los profesionales médicos no están seguros de por qué ocurre esta enfermedad, pero la consideran una afección autoinmune. Esto significa que el sistema inmunológico ataca por error al cuerpo en lugar de solo a invasores extraños. En cuanto a los tratamientos, los corticosteroides son el tratamiento de primera línea. Otras opciones incluyen medicamentos inmunosupresores, biológicos e inmunoglobulina.

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