Según una historia de SELF, Jaime Stathis vive con una rara condición llamada misofonía, en la que ciertos sonidos desencadenantes pueden causar estados emocionales negativos y arrebatos. Jaime habla sobre cómo ha lidiado con su enfermedad en el contexto de la pandemia global de coronavirus/COVID-19. Ella sabía mucho antes de recibir un diagnóstico oficial que ciertos sonidos podrían irritarla profundamente. Desde entonces, había desarrollado estrategias para lidiar con los sonidos desencadenantes, pero la pandemia ha llevado su misofonía al límite.
Sobre Misofonía
La misofonía se propuso por primera vez como afección médica en el año 2000 y se caracteriza por sonidos específicos que desencadenan pensamientos negativos profundos, emociones e incluso reacciones físicas de los pacientes. Se sabe muy poco sobre la afección, que no está clasificada oficialmente como una afección auditiva o psiquiátrica, y no tiene parámetros de diagnóstico claramente definidos. Solo se ha realizado una investigación mínima sobre el tratamiento o su prevalencia. La causa y el mecanismo de la misofonía también sigue siendo un misterio, aunque puede implicar una disfunción del sistema auditivo central. La mayoría de los «sonidos desencadenantes» suelen tener un volumen bastante suave, y alrededor del 80 por ciento de ellos involucran la boca (por ejemplo, susurrar, hacer estallar chicle, masticar, sorber, sorber). El 60 por ciento eran sonidos repetitivos. Para obtener más información sobre la misofonía, haga clic aquí.
Jaime ha estado viviendo con su compañero Martin, y fue solo después de que comenzaron a comer más juntos en privado que ella comenzó a reconocer su masticación como un sonido de activación. Estos y otros desafíos han inspirado a Jaime a compartir algunos de sus consejos más esenciales para la pandemia con otros pacientes con misofonía.
- Encuentre una comunidad de pacientes. Interactuar con otros pacientes puede ayudar a que la afección se sienta menos aislada y confusa. Puede que te sorprendan las comunidades activas en plataformas de medios como Reddit, Facebook e Instagram. El Podcast de Misofonía es un buen ejemplo.
- Infórmese sobre la misofonía. Si bien hay mucha información disponible, se desconoce mucho sobre la afección. Sin embargo, obtener una mejor comprensión es fundamental. El Fondo de Investigación de Misofoonía es un buen lugar para comenzar.
- Desarrolle estrategias para evitar los sonidos de activación siempre que sea posible. Cuando Jaime sabe que Martin está a punto de empezar a comer, ella sabe que es hora de ir a otra habitación, hacer algunos quehaceres o tareas al aire libre o ponerse unos auriculares con cancelación de ruido.
- Aproveche el poder del ruido blanco. Puede ser cualquier tipo de generación de ruido suave y constante que pueda contrarrestar los impactos de los sonidos de disparo. Los ejemplos incluyen un difusor de aromaterapia, el sonido de un lavavajillas o una lavadora en funcionamiento, ventiladores o máquinas dedicadas de ruido blanco. Jaime recomienda una aplicación llamada White Noise Market.
- Haga todo lo que pueda. Esto puede contrarrestar las emociones negativas desencadenadas por la afección. Caminar, correr o desarrollar una práctica meditativa puede producir beneficios.
- Considere buscar terapia si es posible. La terapia cognitivo-conductual puede ayudar a regular las emociones negativas, mejorar las estrategias de afrontamiento y mejorar la comunicación.