Lindy Thrackston, presentadora de noticias de FOX59 en Indianápolis y maestra de ceremonias de los Indiana Pacers, fue entrevistada recientemente con ON TODAY. Ella dice que su cáncer se detectó a tiempo, pero no antes de que alcanzara la etapa 3.

De alguna manera, Lindy logró pasar un año de operaciones y tratamiento para el cáncer colorrectal. Ella cree firmemente que si alerta a otros sobre los síntomas y la importancia de la detección temprana, se salvará una vida.

Es difícil evaluar cómo la cancelación de sus tres pruebas programadas puede haber afectado la progresión de su enfermedad. Lindy logró pasar un año de operaciones y tratamiento, pero hubo varias complicaciones graves.

Los Síntomas

Lindy estaba experimentando dolores de espalda y calambres abdominales y algo de sangre en las heces. Aunque preocupante, su apretada agenda hizo que dejara de lado cualquier preocupación.

Cuando Lindy comenzó a sentirse inusualmente fatigada, finalmente se comunicó con un médico que inicialmente pensó que Lindy tenía colitis. Una tomografía computarizada mostró signos de inflamación, aunque no había antecedentes familiares de cáncer colorrectal.

El médico decidió ordenar una colonoscopia. Fue entonces cuando COVID comenzó a dictar quién y cuándo puede ser examinado o atendido por un médico. Pero el médico de Lindy seguía insistiendo en que se hiciera la prueba y ahora Lindy le da crédito a ese médico por haberle salvado la vida.

Ahora, en retrospectiva, Lindy se da cuenta de que esos síntomas eran señales de advertencia que indicaban que era hora de actuar. Ese es el mensaje que espera transmitir a los demás.

El Diagnostico

Al final resultó que, Lindy pudo mantener la tercera colonoscopia programada. Se sintió afortunada de que el médico que realizaba la prueba fuera un cirujano de cáncer colorrectal.

Lindy ni siquiera se había recuperado cuando escuchó a una de las enfermeras mencionar «tumor». Lindy fue diagnosticado con cáncer colorrectal en estadio 3. Sus primeros pensamientos fueron en su hijo y su esposo y se preguntó cuánto tiempo le quedaba para pasar con ellos.

El cirujano se reunió con Lindy de inmediato y le presentó un plan de tratamiento. Primero, administró pruebas genéticas, pero no pudo encontrar marcadores que identificaran la causa de su cáncer.

El tratamiento consistió en quimioterapia oral y radiación antes de la cirugía. Después de la cirugía, Lindy se sometería a quimioterapia por infusión.

Todo el tratamiento se detuvo después de recibir su decimoquinta ronda de radiación. Lindy tenía un bloqueo intestinal que requirió cirugía de emergencia y veinticuatro días de hospitalización. Pero los ataques de bloqueo continuaron. Lindy literalmente pasó todo el verano entrando y saliendo de la sala de emergencias lidiando con varios bloqueos. La cronología de su verano se parece a esto:

· 30 ^de Junio: cirugía de emergencia para remediar la obstrucción intestinal

· 8 ^de Julio – dado de alta

· 15 ^de Julio – Urgencias con latidos cardíacos rápidos (taquicardia)

· 29 ^de Julio – inserción de su puerto

· 24 ^de agosto -cirugía

La cirugía fue exitosa y removió el tumor, cuarenta y un ganglios linfáticos y más de veinte centímetros del colon. A esto le siguió más cirugía para remediar la hemorragia interna.

Después de la cirugía, Lindy tuvo que tolerar diez rondas de quimioterapia por infusión. Estaba programada para las doce, pero tuvo que detener la quimioterapia ya que su cuerpo no podía soportar ni dos infusiones más de quimioterapia.

Luego, solo dos días después de que interrumpió la quimioterapia, los médicos extirparon la vesícula biliar de Lindy.

Viendo Hacia Adelante

El objetivo de Lindy es hablar sobre el cáncer colorrectal y especialmente el mito de que es una enfermedad de los ancianos. Según la Sociedad Estadounidense del Cáncer, alrededor de dieciocho mil personas menores de cincuenta años recibieron un diagnóstico de cáncer colorrectal en el año 2020.

Lindy espera que su podcast sobre su lucha contra el cáncer ilumine y anime a otros a buscar ayuda si observan los siguientes síntomas:

• Sangrado rectal.
• Pérdida de peso inexplicable.
• Dolor abdominal.
• Deficiencia de hierro
• Heces estrechas.

Lindy dijo que los informes actuales indican que las pruebas de detección del cáncer colorrectal se han reducido en un noventa por ciento durante la pandemia. Eso se traduce en que muchas personas reciben un diagnóstico en las últimas etapas del cáncer con menos posibilidades de supervivencia.

Ahora que Lindy no tiene cáncer, planea regresar a sus trabajos en FOX59 y como maestra de ceremonias en Indy 500.

Muchos centros de infusión de cáncer tienen una campana colgada en la pared que los pacientes hacen sonar cuando terminan su tratamiento contra el cáncer. Lindy dijo que tenía la culpa de sobreviviente cuando tocó el timbre y miró a los pacientes que estaban sentados allí recibiendo tratamiento y que no estaban seguros de su futuro.

Como prueba de que el mensaje de Lindy puede ayudar a otros, una joven le escribió que vio el tuit de Lindy y que la impulsó a ver a un médico. Según sus médicos, le extirparon los pólipos precancerosos justo antes de que se volvieran cancerosos.